Llegan los días santos, los días de descanso físico y psicológico y la recarga de batería espiritual y mental, la toma de conciencia de uno mismo.
Hoy no hay nada especial que contar sobre el mundo de las abejas. Bueno, sí, acabo de comprar un libro titulado "Historia de las abejas" para leerlo en estos días de vacaciones. Me han hablado muy bien de él. Os lo resumo por si os sirve de lectura:
Historia de las abejas, la novela revelación de las letras noruegas, es una historia épica y global en la que, mediante tres narraciones entrelazadas, Maja Lunde reflexiona sobre los seres humanos y su relación con la naturaleza a lo largo del tiempo.
1. En la Inglaterra de 1852, William, un naturalista y comerciante de semillas que no pasa por su mejor momento, lucha por desarrollar un tipo de colmena totalmente nuevo que les valdrá a él y a sus hijos fama y respeto.
2. George es un apicultor de los Estados Unidos que en 2007 pone todas sus esperanzas en que su hijo universitario continúe con el sacrificado negocio familiar.
3. En la China del año 2098, donde las abejas han desaparecido y con ellas el mundo tal y como se conocía, Tao se dedica a la polinización manual, con el deseo de dar a su hijo una vida mejor que la suya.
Bueno, pues eso, cuando lo tenga leído ya os daré mi opinión y si merece la pena ser leído (hasta os podré dejar el libro para que no tengáis que comprarlo).
Por otra parte, y esto duele un "copón", acabo de adquirir 39 núcleos/enjambres de abejas, que a 60 € cada una cuestan un riñón. Si a eso le añadimos el azúcar que he comprado, ¡para darles de comer, porque no hay floración porque no ha llovido!, además del tratamiento contra la varroa... Esto se pone con las cuentas claras y con la opinión de mujer en un claro y exclamativo: ¡Mejor nos valdría enviar el dinero directamente a Ecuador y así ni padeceríamos ni sufriríamos!
Es cierto, resulta cansino tener que viajar un día en semana hasta Añavieja para preparar el jarabe de azúcar, dar de comer a las abejas en bolsas, recoger el obrador y volver a Logroño!
En fin, que va a resultar que tenemos que aprender a llover agua para alimentar a los romeros y a los tomillos de la zona.
Bueno, por lo demás, todo bien. Damos gracias a Dios porque nos mantiene vivos y con trabajo, porque nuestros hijos parece que estudian y la familia está tranquila y los abuelos centrados.
Os deseamos a todos y a todas lo mejor de lo mejor, de verdad. Disfrutad de cada momento bueno que os venga dado, solazaos en esos momentos de remanso y paz porque de los momentos malos ya sabréis cuando os lleguen.
Recibid un abrazo de paz que se haga extensivo a toda vuestra familia.
José Manuel
Os adjuntamos una foto de nuestro hijo Alberto rompiendo la cinta el domingo al llegar a meta en primer lugar en la carrera popular "Universidad de La Rioja".
