domingo, 9 de diciembre de 2012

AÑO 2012 Año de aprendizaje, año de transición

Este año lo recuerdo como el de la gran sequía en España. También hubo sequía en nuestros resultados y, sobre todo, hubo MUCHO APRENDIZAJE.
Me convertí en una esponja aprendiendo a trabajar con abejas. Pasé muchos sábados del año acompañando a Íñigo a Santurdejo, dejándole desgranar su sabiduría e introduciéndola en mi mente.
Fue un año de aprendizaje como apicultor, pero también fue un año enriquecedor porque compartí mesa y buenas charlas de sobremesa con Pablo y Piedad, los padres de Íñigo, en Santurdejo. En su casa tuve una gran acogida, la misma que sigo teniendo hoy. Esta experiencia con la familia Aransay es de lo mejor que me ha pasado en el mundo apícola.
Hicimos otra inversión pues compramos 30 colmenas perfección de segunda mano.

Concluyó el año con 35 colmenas, 10 más que el año anterior.