miércoles, 23 de septiembre de 2020

CONCLUYÓ LA CAMPAÑA DE EXTRACCIÓN DE MIEL

 Buenas tardes y buena protección contra el COVID.

El lunes y el martes de la semana pasada extraje la miel de 41 colmenas con la ayuda de mi hijo Alberto. Fueron dos días intensos en los que no hubo tiempo para nada, tan solo para trabajar y trabajar. Este martes, 22 de septiembre (fiestas de San Mateo, en Logroño, pero que no se celebraron por causa de la pandemia del COVID), terminamos de extraer la miel de las colmenas. 

Este lunes y martes, acompañado de mi esposa Carmen, extrajimos la miel de las 23 colmenas que quedaban pendientes. También embotamos la miel de la extracción de la semana pasada e hice algunos arreglos y novedades en el almacén donde cuelgo los cuadros (fue una granja de cerdos).

El año apícola hubiera resultado excelente si hubiéramos obtenido buena cosecha de primavera, pero solo fueron 69 pobres kilos de miel. Ahora, contabilizados los resultados, en temporada de verano y otoño, calculamos que obtendremos 1.750 kg, lo cual está muy bien si tengo en cuenta que sólo producían 60 colmenas. De lo sucedido se pueden obtener reflexiones que yo mismo me he hecho. La primera es que si me hubiera dejado llevar por el desánimo, la angustia y la depresión después de obtener los 69 kilogramos de primavera, es seguro que no hubiéramos obtenido la buena cosecha de verano. Pero en mi ego no cabe - por ahora - un espacio para el desánimo y por eso trabajé duro en junio, alimenté colmenas, las vigilé y mejoré las condiciones del asentamiento, puse un bidón de agua de 1.000 litros, igualé las bases de apoyo de las colmenas y les dediqué más cariño del habitual.

También he mejorado las condiciones de la vieja granja de cerdos. La he barrido y raspado para quitarle los restos secos que afeaban el espacio, he puesto una segunda bandeja doble de colgadores de cuadros, separados unos de otros para combatir la polilla, he puesto luces (3 bombillas de led) para poder trabajar cuando no haya luz natural. Queda todo muy práctico y muy bonito, hasta el punto de que puedo colgar 1.000 cuadros y evitar el ataque de la polilla.

Este fin de semana he tratado las abejas contra la varroa y a la vez las he alimentado para que las reinas pongan huevos. En semanas venideras las continuaré alimentando para aumentar la población de abejas y que afronten el invierno con fuerza. Al final de mes de octubre les daré el último alimento y las trataré con gas oxálico. Espero que con estos procesos pasen bien el invierno y comencemos el nuevo año con fuerza.

Ya tengo "in mente" nuevas ideas para mejorar el asentamiento de Añavieja, creando pasillos de entrada y salida para cada una de las filas de colmenas, poder dar cabida hasta 95 colmenas y trabajar cómodo, sin tener que llevar las colmenas y las alzas a mano desde el carro hasta el asiento de cada colmena. Además, he decidido bajar al asentamiento de Valverde varios pales, tablas y otros apaños para igualar el suelo donde colocar las colmenas pues está desastroso, con muchas piedras y difícil de trabajar.

El próximo año espero mejorar mi aprendizaje con nuevas propuestas y escuchando los consejos de mi maestro Íñigo.

Tiempo al tiempo y muchas ganas para sacar todo adelante. Ahora, lo prioritario es vender la miel que hemos cosechado. Ya enviamos 2.500 € a Ecuador al inicio de la pandemia y ahora vamos a enviar otros 4.500 €, que seguro que los necesitan para cubrir algunas necesidades.

La semana que viene vuelvo a Añavieja para "ayudar" a mi hermano en la extracción de las patatas. Nos esperan dos o tres semanas de curro y 7 hectáreas de patatas para trabajar.

Y nada más, por ahora. Sólo queda vender miel y sacar patatas. Buen reto para crear formas de venta de ambos productos.

Un abrazo.

José Manuel