jueves, 26 de marzo de 2020

CORONAVIRUS Y TRABAJO EN SOLITARIO

Buenas noches.
Son las 20:00 y concluye por hoy mi trabajo en el pueblo. 
Hace dos días compré 53 núcleos porque se me habían muerto casi todas las colmenas y mi futuro era parecido al de un aquejado de coronavirus.
Ayer, jueves, estuve pasando muchos núcleos a colmenas, pero aún me quedan pendientes 14 por pasar. Después trabajé todo el día hasta acabar agotado y con fuertes dolores en mi pierna operada de hernia discal y con fuerte dolor del menisco de la rodilla iquierda (el menisco de la rodilla derecha me lo operé hace dos años).
Por otra parte, estoy alimentado a todas las colmenas con buenas dosis de jarabe, bien espeso.Eso las hará crecer y superar estos días alternos de frío por la noche y por la mañana y calor por la tarde.
Esta noche he dormido poco y mal. Los dolores de menisco y de hernia eran fortísimos. Me he levantado y me he puesto alternativamente hielo y calor eléctrico en la pierna izquierda. 
Hoy tenía cargado el gemelo de la pierna izquierda como consecuencia del dolor y de la tensión. Así es que me he puesto medias de ciclismo para contrarrestar la tendinitis. Pero no por eso he bajado el ritmo de trabajo.
Veamos, he mejorado el asentamiento principal con ayuda de mi hermano, el cual ha ido con tractor y pala, me ha alargado las bases de apoyo de las colmenas, ha allanado el terreno y me lo ha dejado inmaculado (dos horas de trabajo). Por la tarde - aquejado de dolores de menisco - he colocado las bases para 50 colmenas.
En estos dos días he preparado 56 alzas para cuando tenga que colocarlas en las colmenas, y he realizado algunos trabajos de cierto esfuerzo. Creo que esa es la causa de mis dolencias.
Mañana continuaré acondicionando el asentamiento hasta llegar a poder colocar 100 colmenas. Pero tengo pendiente limpiar muchos cuadros con cera vieja. Así es que ya veremos cómo acaba el día.
He tenido que desembolsar varios miles de euros para comprar los núcleos y estoy trabajando denodadamente para mejorar mis infraestructuras. Sólo espero que la Providencia multiplique tanto esfuerzo.
Y nada más por hoy. Espero disfrutar de una noche de sueño apacible y levantarme con renovado entusiasmo y menos dolores.
Un abrazo a la concurrencia y me leéis en el próximo episodio.
José Manuel