Lamento tener que deciros que ha sido inviable trabajar con las colmenas durante al menos 5 semanas. Los fríos, las nieves, las heladas... hacían inviable el acercamiento al asentamiento de Valverde de Ágreda.
¡Por fin! Este fin de semana me he acercado a ver a las "amigas" por ver si tenían necesidad de comida y me he encontrado con una colmena muerta de hambre. Eso me duele porque les he dejado mucha miel para pasar el invierno, pero el frío ha sido tan intenso (muchos días bajo cero) que ha propiciado que las abejas consumieran mucha miel para darse calor y... una de ellas pereciera por haber agotado el avituallamiento. Era una colmena muy poblada y han acabado con todas las reservas de miel.
Para combatir el frío y el hambre, he tenido que darles comida y revisar el asentamiento a conciencia.
Podréis apreciar que aprovecho los espacios más impensables. En este caso se trata de un corral, que en su día fue vivienda. Las lluvias y el paso del tiempo han derribado las paredes y yo he aprovechado para colocar las colmenas al abrigo de los vientos (por allí campan fuertes). Al fondo observaréis la cumbre de Moncayo llena de nieve (2.314 metros).
En la otra fotografía apreciaréis el asentamiento que bordea la montaña de Pégado (1.302 metros). Esta mañana estaba nebusqueando a las 8:30 horas. Hacía frío, el agua de los charcos estaba congelada, pero el paseo de una hora y media por el encinar ha sido precioso, sedante.
Ha caído mucha agua durante este invierno, la tierra está empapada y esperamos que eso se traduzca en una primavera con mucha fuerza, con romeros a tope en floración y... ¡mucha miel! Hace ya dos meses que acabamos de vender toda la miel, estamos sin nada, a la espera de que llegue la floración de romero y a mediados de mayo podamos empezar a catar miel de romero. Muchos clientes de Añamiel nos están reclamando que les atendamos, ¡pero no tenemos más! Ya quisiéramos nosotros atender a todos y poder enviar más dinero a Ecuador.
También os anunciamos que hay movimiento en nuestra cochera. La vamos a convertir en obrador con todos los requisitos que eso conlleva a nivel oficial: SANIDAD A TOPE, aislamiento del local, trazabilidad de la extracción de miel... Para eso hemos puesto nuestro proyecto en manos de Celes (taller metálico los MACAS, de Ágreda) y esperamos que con no mucho dinero el rincón de la cochera se convierta en un obrador operativo.
Como veis, todo requiere de dinero y más dinero, inversión en mejoras de infraestructura y... esperamos que para final de año nos hayan concedido el Nº de REgistro Sanitario.
Creo que dentro de un mes aproximadamente comenzaré a crear núcleos de las colmenas (a sacar hijos) y a poner alzas para que produzcan miel. Hasta entonces, recibid un abrazo y disfrutad de las fotografías que os cuelgo.
JoséManuel
Corral en ruinas que cumple su función protectora contra los vientos
Asentamiento del Pégado, adornado con ventisca
